BADAJOZ, 27 de septiembre.

La ciudad de Badajoz se sumerge esta semana en su historia con la celebración de la fiesta Al-Mossassa, un evento que destaca su herencia árabe y ha sido reconocido como de Interés Regional. Este año, la Alcazaba se convierte en el epicentro de la festividad, donde los asistentes podrán disfrutar de actividades como cuentacuentos, cetrería, exposiciones y talleres dedicados a la cocina y maridaje andalusí.

El alcalde de Badajoz, Ignacio Gragera, ha subrayado la importancia de esta conmemoración, que busca presentar de manera interactiva los orígenes de la ciudad. Gragera enfatiza que, aunque Badajoz tiene una sólida tradición cristiana, también se enriquece con el legado de sus fundadores árabes. “No olvidamos nuestras raíces”, aseguró el alcalde durante la inauguración.

Desde su inicio en 1998, la fiesta ha ido ganando en popularidad y este año cuenta con la participación de 111 expositores, además de realizarse adaptaciones en los espacios del zoco árabe debido a las obras en la Plaza de San José. Las actividades se extienden entre la Plaza Alta y la Alcazaba, ofreciendo una variada oferta de artesanía, gastronomía, música y un entorno visiblemente decorado que realza la experiencia cultural de la festividad.

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