Agentes de la Policía Nacional detuvieron a dos hombres de 30 y 33 años por tener una plantación de marihuana ilegal y defraudación de fluido eléctrico en una vivienda en Mérida. La plantación contaba con 193 plantas y se conectó ilegalmente a la red eléctrica.
La investigación comenzó debido a cortes de luz constantes en un edificio en la calle Francisco de Ulloa en la capital de Extremadura. Los ascensores se detenían ocasionalmente con vecinos en su interior, lo que supone un grave peligro para su seguridad física.
Los agentes descubrieron que había un enganche ilegal a la red eléctrica ya que en los contadores había cables que no pertenecían a la instalación original, y la empresa eléctrica les informó de la existencia de defraudación de fluido eléctrico en una vivienda del edificio. Con esta información se inició la Operación Ángelus.
Tras numerosas vigilancias discretas, los policías identificaron a los presuntos autores del delito. El día 16 de mayo vieron a uno de los sospechosos salir de la vivienda con una bolsa grande. Al darles el alto, "huyó a la carrera, comenzando una persecución infructuosa por la avenida de Portugal de esta localidad", explica la Policía Nacional en una nota de prensa.
Al día siguiente, con la autorización judicial necesaria, se realizó una entrada y registro en la vivienda investigada, donde se detuvo a un hombre por tráfico de drogas y defraudación de fluido eléctrico. Mientras tanto, cerca de la misma, se detuvo al hombre que huyó el día anterior, por resistencia y desobediencia.
La plantación interior de marihuana que la policía encontró tenía 193 plantas. Además, encontraron 4.985 gramos de la sustancia listos para su venta. Los dos detenidos fueron llevados a dependencias policiales para tramitar el correspondiente atestado policial. Actualmente, la investigación sigue abierta y la Policía Nacional no descarta nuevas detenciones.
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