En el bombeo del embalse de Valdecañas (Cáceres), autorizado por el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico a la compañía eléctrica Iberdrola, se espera la creación de 150 empleos directos, 500 empleos indirectos en empresas locales, y la carga de 5,2 millones de baterías de coches eléctricos.

El proyecto, que empezará sus obras en diciembre de este año y finalizará en 2026, contará con una potencia total de 275 megavatios (MW) e incluirá un sistema de batería hibridada con capacidad de almacenamiento de 15 y 7,5 megavatios hora (MWh), y una reserva energética de 210 gigavatios hora (GWh).

Este proyecto involucra dos embalses a diferentes alturas, Torrejón y Valdecañas, donde se aprovechará la energía potencial del agua a través de un circuito cerrado para generar energía hidroeléctrica, según explicó el CEO de Iberdrola, Mario Ruiz-Tagle.

El bombeo permitirá una mejor gestión de la cuenca del río Tajo, proporcionando recirculación de agua y estabilización en los niveles de cota de los embalses, lo que favorecerá la generación hidroeléctrica mediante ciclos de bombeo según las necesidades del sector eléctrico.

El almacenamiento de energía es fundamental para la incorporación de más energías renovables, especialmente con el aumento de producción solar, lo que requiere flexibilidad en la generación para capturar y acumular esta energía, destacó Ruiz-Tagle, resaltando el compromiso de Iberdrola con la región.

Iberdrola opera 2,500 megavatios en fotovoltaicas y está en proceso de construir otros 400 megavatios en la región, demostrando su confianza y compromiso con el crecimiento sostenible y la inversión en la zona.

En el evento en el Hotel Hospes Palacio de Arenales asistieron también representantes políticos, económicos y sindicales de la región, incluyendo el delegado del Gobierno en Extremadura, José Luis Quintana, la diputada de Medio Ambiente de la Diputación de Cáceres, Angélica García Gómez, y el alcalde de Cáceres, Rafael Mateos.