En Mérida, el calendario escolar para el ciclo académico 2025/26 en Extremadura ha sido finalmente configurado, marcando el inicio de la actividad lectiva para diversos niveles educativos. De acuerdo con la información proporcionada por la secretaria general de Educación y Formación Profesional, María del Pilar Pérez, las clases comenzarán el 11 de septiembre para Educación Infantil, Primaria, ESO, Educación Especial, y los grados básicos de Formación Profesional, así como para el segundo curso de estos programas.

Los estudiantes de Bachillerato se darán cita en las aulas a partir del 12 de septiembre, y los alumnos de primer curso de los ciclos formativos de grado Medio y Superior de FP comenzarán sus actividades el 15 de septiembre. Este anuncio llegó tras la aprobación del calendario en la Mesa Sectorial de Personal Docente, donde participaron diversos representantes sindicales.

Pérez también destacó que el año escolar concluirá el 19 de junio para Educación Infantil, Primaria y la ESO; el 17 de junio para los alumnos de primero de Bachillerato y el 8 de mayo para los que cursan segundo de Bachillerato. Las enseñanzas de Formación Profesional culminarán el 12 de junio, dando a cada nivel una estructura clara y accesible.

Para las enseñanzas de régimen especial, como las Elementales y Profesionales de Música y Danza, el inicio está programado para el 1 de octubre, con finalización el 12 de junio de 2026. Por su parte, las Enseñanzas Artísticas Superiores de Arte Dramático, Diseño y Música comenzarán el 22 de septiembre, con un cierre el 26 de junio de 2026.

Los alumnos de las Escuelas Oficiales de Idiomas también esperarán hasta el 1 de octubre para comenzar su formación, que se extenderá hasta el 29 de mayo de 2026. En relación a las enseñanzas deportivas de régimen especial, estas deberán dar inicio antes del 7 de octubre y no podrán concluir antes del 12 de junio de 2026, de acuerdo con la normativa establecida por la Junta de Extremadura.

Este reciente anuncio refleja un esfuerzo por parte del gobierno regional para organizar el año escolar de una manera que beneficie a estudiantes y docentes por igual, garantizando un inicio claro y tiempos definidos para la finalización de las actividades educativas.