En Mérida, el 7 de julio, se celebró una reunión significativa del Comité Federal del PSOE, donde el secretario general del partido en Extremadura, Miguel Ángel Gallardo, planteó una propuesta audaz: que el PSOE se constituyera como "acusación particular" en las causas legales que afectan a exdirigentes de la formación. Esta propuesta refleja un compromiso por parte del partido de tomar una postura firme y decidida en momentos de crisis.

La portavoz del PSOE en Extremadura, Isabel Gil Rosiña, ofreció una rueda de prensa posterior al encuentro, subrayando la relevancia del posicionamiento del partido durante este difícil Comité Federal. Destacó que no era un ambiente fácil, dado los retos que enfrenta la organización en la actualidad, lo que demandó una respuesta a la altura de las circunstancias.

Gil Rosiña enfatizó la necesidad de abordar los problemas de manera frontal y mostrarse contundente en las decisiones. Esta postura fue apoyada por Miguel Ángel Gallardo, quien actuó conforme a un "mandato previo" del comité regional, mostrando así unidad y determinación ante las adversidades.

Durante su intervención, Gallardo no escatimó en señalar la importancia de la autocrítica en un partido que ha atravesado situaciones difíciles, descritas por él como "hechos incontestables e intolerables". Afirmó que era vital establecer "mecanismos de control más efectivas" en la gestión interna del partido, una medida que busca restablecer la confianza y garantizar la transparencia en el PSOE.

Para más información, se puede consultar Europa Press.