En Mérida, a 21 de octubre, la Junta de Extremadura está a la expectativa de una respuesta del PSOE respecto a una propuesta de "justicia tributaria" que busca modificar el IRPF, con un impacto financiero proyectado de aproximadamente 8 millones de euros. Esta iniciativa plantea que "no habrá aumentos en los impuestos para nadie".

El Ejecutivo autonómico sugiere específicamente una reducción en los tramos tercero y cuarto del IRPF, sin incrementar las tasas en los tramos superiores, argumentando que la carga fiscal actual ya es bastante significativa para los ciudadanos.

Esta propuesta se enmarca dentro de un contexto más amplio de negociación, ya que el PSOE previamente había presentado una alternativa que implicaba un desembolso de 14 millones de euros. Sin embargo, esta propuesta fue criticada por incluir "fallos técnicos" en los tramos 8º y 9º por errores en la suma de las cuotas, así como por favorecer a ciertos contribuyentes a través de una disminución en los tipos impositivos.

La portavoz del Gobierno extremeño, Elena Manzano, abordó esta cuestión durante una conferencia de prensa, resaltando el compromiso del Gobierno regional de mantener un diálogo activo con todas las fuerzas parlamentarias para garantizar que los Presupuestos Generales de Extremadura para 2026 se traduzcan en una realidad palpable para la comunidad.

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