En la mañana del 15 de agosto, Cáceres se encuentra aliviada tras enfrentar una intensa serie de incendios que generaron gran preocupación en la región. La Junta de Extremadura ha informado que la noche anterior resultó ser "muy positiva", ya que no se registraron reactivaciones en el incendio que afecta a Jarilla, un área que ha sufrido una devastación significativa.

El consejero de Presidencia, Interior y Diálogo Social, Abel Bautista, compartió su perspectiva sobre la grave situación vivida, manifestando que, aunque se trató de un momento crítico, la calma nocturna brindó un respiro muy necesario. Bautista habló con la prensa después de una reunión del Cecopi en el Puesto de Mando Avanzado del 112 de Extremadura, que ha sido habilitado en La Granja.

El incendio en Jarilla ha consumido cerca de 4.800 hectáreas, generando un perímetro de 50 kilómetros. A pesar de su magnitud, Bautista indicó que no se han registrado reactivaciones en las poblaciones evacuadas, y lo más esperanzador es que las áreas afectadas no han ampliado su extensión.

En la última sesión del Cecopi, se decidió mantener las medidas de prevención que incluyen el confinamiento de Oliva de Plasencia y la evacuación de varias localidades cercanas, tales como Jarilla, Villar de Plasencia y Cabezabellosa. No obstante, el consejero se mostró optimista y anticipó que pronto se podrían recibir "noticias positivas sobre la situación de la población".

Bautista enfatizó que cualquier decisión de retornar a la normalidad dependerá de garantizar la seguridad total de los vecinos, afirmando: "Si puede ser, será, y si no puede ser, no será", lo cual refleja una cautela razonable en estos momentos críticos.

(Información adicional disponible en Europa Press)