La reciente actuación de la Policía Nacional ha llevado a la detención de seis hombres involucrados en la gestión de un "narcopiso" en el centro de Badajoz, donde se hallaron importantes cantidades de cocaína y heroína.

Esta intervención es el resultado de la denominada Operación Marwan XXV, que comenzó cuando los agentes recibieron informes sobre una vivienda en Badajoz que supuestamente funcionaba como punto de venta de drogas. A partir de ahí, se realizaron seguimientos discretos para confirmar la actividad del lugar.

Las observaciones revelaron un flujo constante de consumidores que acudían a la vivienda, considerado “uno de los núcleos más activos de venta y consumo en la región”. Dentro, se habían acondicionado habitaciones para el uso de las sustancias adquiridas, lo que multiplicó la complejidad del entorno.

De manera concomitante, se estaba llevando a cabo una investigación relacionada con delitos de lesiones y amenazas que también se producían en este espacio, implicando a varios de los detenidos en la trama de drogas, según informaron las autoridades en un comunicado.

La casa era gestionada por individuos previamente arrestados, quienes habían implementado medidas de seguridad más estrictas, complicando así la labor de los investigadores.

El grupo delictivo tenía una organización estructurada en pirámide, donde las funciones variaban desde aquellos que proporcionaban las drogas y gestionaban el dinero recaudado, hasta los que realizaban la venta directa y control del "narcopiso". En la base de la pirámide se encontraban adictos que atraían a los consumidores y llevaban a cabo funciones de vigilancia en el exterior.

Con la autorización correspondiente del juez, el 11 de septiembre se realizó un registro en la vivienda, lo que resultó en la detención de seis personas. Durante la operación, se recuperaron cantidades significativas de cocaína, suficiente para preparar alrededor de 420 dosis, así como heroína, que podría rendir 370 dosis adicionales, además de dinero en efectivo y herramientas para su distribución.

Según la Policía Nacional, durante la entrada, algunos de los presentes reaccionaron con agresividad hacia los agentes, lo que llevó a añadir un cargo por atentado contra la autoridad.

Los arrestados, que oscilan entre los 20 y 60 años y varios de ellos con antecedentes penales, fueron finalmente presentados ante la autoridad judicial. En consecuencia, uno de ellos ha sido enviado a prisión tras la evaluación del caso.