MÉRIDA, 17 de diciembre.

Un impulso de solidaridad y justicia social se hizo presente en la jornada de hoy cuando un grupo considerable de ciudadanos se reunió en una concentración organizada por CCOO frente a la sede de la Presidencia de la Junta de Extremadura. Su objetivo era manifestar su desacuerdo con el reciente acuerdo alcanzado entre CSIF, UGT y la administración, que establece que el abono de la subida salarial del 2% correspondiente a 2020 se realizará en tres plazos a lo largo de los próximos años.

El coordinador del Área Pública de CCOO Extremadura, Manuel María Nicolás, argumentó con contundencia que el acuerdo no es más que una estrategia “electoralista”, ya que el último pago está programado para 2027, coincidiendo con la proximidad de las elecciones autonómicas. Esta situación plantea serias dudas sobre la genuinidad de las intenciones detrás del acuerdo y evidencia la urgencia de una revisión más profunda de las políticas salariales en la región.

Además, Nicolás subrayó que la cantidad que queda pendiente de pagar al personal de la Administración General, al del ámbito educativo y al del Servicio Extremeño de Salud asciende a 25 millones de euros. Esta cifra, consideró, es algo que debió haberse anticipado dentro de un presupuesto anual que sobrepasa los 8.000 millones de euros, demostrando que es un asunto que podría haberse resuelto con más agilidad y responsabilidad.

En consecuencia, desde CCOO han expresado su rechazo a la idea de fraccionar el abono en tres años y demandan que dicho aumento se realice en un único pago en 2025. Dicho aumento salarial del 2% se traduce en aproximadamente 250 euros al año para los trabajadores de los grupos más bajos. Este acuerdo, tal como fue planteado, implicaría que solo 65 euros se abonarían anualmente en 2025, 2026 y 2027, una cifra que resulta insuficiente y poco alentadora para los empleados.

(Para más información, consulta Europa Press)